El “Camarada” Augusto Barreto, periodista, productor y escritor, aseguró que la sociedad no se divide entre “periodistas y corruptos“, a la vez de manifestar que los comunicadores paraguayos deben perder la arrogancia.
El antiguo productor de “El Ojo“, presenta este jueves su nuevo libro “Días de dolor y gloria“, una mezcla de realidad y ficción, donde Barreto navega entre los recuerdos congelados y las esperanzas de hace unas décadas. La obra se presentará en la Casa de la Literatura (México c/ 25 de Mayo), a las 19:30 horas.
-¿De dónde surge tu “título de Camarada”?
-Me gustaría decírtelo, pero la edad produce pérdida de memoria y otras cosas que no me acuerdo.
-¿Hace cuánto escribís ficción?
-Escribiendo canciones, hace muchos años que hago ficción. Pero en materia de libro, creo que este es el único en el que apelo un poco a la ficción. En realidad son ocho historias reales; en algunos casos sutilmente ficcionadas; y en otras, totalmente reales.
-¿Hay mucha semejanza con hacer periodismo?
-En ambos caso se escribe y se usa la computadora.
-¿De qué trata “Días de dolor y gloria”?
-Parto de experiencias personales de los años de horror que me tocó vivir en la Argentina de los ‘70. Historias dolorosas de las que los paraguayos no fuimos la excepción. Y lo difícil que nos sigue costando que la referencia de nuestras relaciones sean nuestras coincidencias y no nuestros desencuentros.
-Se nota a veces un quiebre entre la nostalgia y el recuerdo que debe mantenerse vivo a través de lo que escribís. ¿Jugás para ambos en tu obra?
-En este libro hay muchos recuerdos contaminados de una tremenda nostalgia, recuerdos de amigos entrañables, prácticamente de la adolescencia, que no tuvieron la suerte que tengo yo de poder contar la historia que nos tocó vivir. Chicos de 16, 18 ó 20 años que quedaron como congelados en aquellos turbulentos años ‘70.
-¿Qué diferencia ves entre esta obra y “Canciones de amor y desamor”?
-Hay más coincidencias que diferencias. Uno y otro título tienen que ver con ese contradictorio virus del afecto y la intolerancia con que nos contagiamos con frecuencia; ese ambiente de amor y odio, que para bien o para mal es justamente la esencia contradictoria de las revoluciones y los cambios.
-¿Considerás que falta más ficción en la Tv paraguaya?
-Directamente no hay ficción. Tal vez porque, para hacer ficción en Paraguay, y que sea creíble, hay que suavizar la realidad en vez de agrandarla.
-Los programas de tv que tiene actualmente la Tv paraguaya, ¿son buenos en general? ¿Qué les falta?
-La verdad, no tengo una opinión seria, porque solo miro los noticieros; y algunos programas periodísticos; el resto, no veo nada nacional.
-¿Cómo ves al periodismo actual?
-Lo mejor: que yo estoy fuera de los medios hace un buen tiempo, salvo algunas producciones independientes que hago. Ahora mismo, estoy terminando un material para la RAI.
-¿Considerás que falta un nuevo programa como “El Ojo”?
-No sé si uno como “El Ojo”, pero creo que faltan programas de investigación donde se les toque a los peso-pesados y no solamente a los ladrones de gallinas.
-¿Qué se puede hacer para mejorar el periodismo paraguayo?
-Un buen comienzo sería ser menos arrogantes, entender que no somos intocables, que también cometemos errores, y que la sociedad no se divide entre periodistas y corruptos.
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